viernes, 17 de mayo de 2019

De la mano




Suspiro por tercera vez y siento que ya no puedo más;
hoy como ayer, llueve, pero mi corazón esta encendido y
se lo que estoy sintiendo, no es extraño, solo impreciso.

El último beso, se ha vuelto mi favorito,
el compás de las caricias fue casi poético ya que
por un instante todo fue perfecto,
la atmósfera, las emociones y las personas.

No temo que me lastimes
temo que me olvides antes de amarme.
No temo amarte
temo que si lo hago estaré perdida,
en tus labios, en tu tiempo, en tu mundo,
en tus brazos, sin mirar a nadie más.

Pero antes de eso, quiero y de verdad que como quiero,
que abraces mi mundo, que conozcas mis letras y te empapes
de mi pasado, para que tu mundo y mi mundo se vuelvan uno,
sin prisas, sin miedos, caminando de la mano.

Hoy como ayer, llueve, pero mi corazón esta encendido,
se lo que estoy sintiendo, no hay vuelta atrás.


                                                                                                      Sun-Mi Laurie

lunes, 13 de mayo de 2019

Nuevo juego

Siento un pequeño vacío en mi corazón y muchas dudas rondando en mi interior.

Se que te iras y que te dejaré ir, no es algo nuevo para ninguno, pero quisiera decir "quédate".

Gano tiempo para tenerte un poco más, vienes y vas como si al dudar quisieras un "me quedo" pronunciar.

Siento una ansiedad que me lleva a la oscuridad, pierdo tiempo buscandote en el espejo, al final te encontraré y lo decidirás.

Todos los besos fueron perfectos, será necesario parar el tiempo, darte el último y un "te quiero" al viento.

Te irás, pero te quedarás y así las piezas se acomodan y nos dan un nuevo juego, sin nada escrito, quiero jugar.

sábado, 11 de mayo de 2019

No apuesto nada

Desde que te vi pude sentir la conexión,
estabas tan seguro de ti delante de mi;
una sonrisa nos abrió el paso a la mirada que nos atrapó.

No apuesto nada, ni nada tengo aun.

Después de una larga caminata el césped nos invito a estar de frente, tan extraños en aquel momento pero con el inevitable deseo de conocernos.

No apuesto nada, ni nada tengo aun.

Tomamos un café endulzado con una suave charla, la música de fondo nos alimentaba el alma, mientras las miradas tímidas se cruzaban y robotaban de un lado a otro.

No apuesto nada, ni nada tengo aun.

Un abrazo de despedida y la risa que al final cerró el día, nos recordó lo extraños que somos y lo cercanos que podemos llegar a ser.

No apuesto nada, ni nada tengo aun.